En el intestino habita una comunidad bien diversa de microorganismos, más de 100 billones, que son claves para nuestra salud. Se conoce como microbiota intestinal que regula funciones indispensables para el correcto funcionamiento de nuestro cuerpo. La composición de esta diversidad microbiana se ve afectada por elementos como la genética, los componentes dietéticos, la edad, el consumo de antibióticos, el estilo de vida o ciertos problemas metabólicos.
Los PROBIÓTICOS son microorganismos vivos (bacterias, hongos) que al administrarse en una cantidad adecuada confieren un beneficio a la salud de quien lo consume. La medida con la que nos referimos a la cantidad de bacterias que contiene un producto Probiótico son las “Unidades Formadoras de Colonia” (UFC).
Las especies más utilizadas son:
- Lactobacillus (Acidophilus, Casei, Gasseri, Johnsonii, Reuteri, Rhamnosus,…)
- Bifidobacterium ( Longum, Breve, Infantis, Lactis, Bifidum, Adolescentes).
- Saccharomyces boulardi
- Bacillus
- Streptococcus
- Enterococcus
Los de nueva generación:
- Akkermansia
- Bacteroides
- Christensenella
- Faecalibacterium
Los probióticos pueden incorporarse a una gran variedad de productos: alimentos, medicamentos y suplementos dietéticos La primera generación se incorporó en forma de liofilizados, la segunda en preparados gastro-resistentes , la tercera en micro-cápsulas y la cuarta en preparados industriales con una doble cobertura. La primera capa de cobertura depende del pH permitiendo que las cepas se liberen en el intestino (y no en el estómago), la segunda capa protege los probióticos de la temperatura, humedad y estrés mecánico (movimientos del intestino) mejorando su resistencia y permitiendo que estén activas allà donde tienen que actuar.
Las formas más comunes para la administración de los probióticos son los productos lácteos y los alimentos con probióticos añadidos o los complementos nutricionales.
Los podemos encontrar en forma sólida (comprimidos, tabletas, cápsulas o sobres) y en formas líquidas (gotas, jarabes o viales).
Algunos micronutrientes pueden ayudarnos a mejorar nuestra microbiota como es el caso de la Vitamina D, el Magnesio, los Ácidos Grasos Omega 3, el EPA y DHA, el Triptófano, la Serotonina, la Melatonina, el Selenio y el Zinc.
¿ CÓMO ACTÚAN ?
Mejorando la digestión , los movimientos peristálticos del intestino, la producción de vitaminas y la protección frente a patógenos.
En nuestro intestino se encuentra dos terceras partes de nuestro sistema inmune (el que nos defiende de las sustancias extrañas). Los alimentos y los microorganismos pueden ser un factor de agresión, pero gracias a la flora bacteriana intestinal (y a la toma de probióticos) nos protegemos frente a las agresiones.
Microorganismos e implicación en enfermedades metabólicas y no metabólicas:
- Halitosis y inflamación de las encías: S.Salivarus
- Problemas de Estómago: L.Acidophilus, E. Faecium, B. Coagulans, B. Subtilis, L. Gasseri, S. Boulardii.
- Celiaquía y alergias alimenarias: Bifidobacteium y Lactocaseibacillus .
- SIBO: S.Boulardii, E. Faecium, L. Acidophilus, L. Plantarum.
- Estreñimiento: Bifidobacteium spp, B. Longum , L. Plantarum.
- Función Hepática: B.Bifidum ,B. Longum, B. Breve, L. Acidophilus, L. Rhamnosus, L. Casei L. paracasei.
- Sistema inmunitario: Bifidobacteium spp, L. Casei, L. Delbrueckii, L. Reuteri.
- Sistema urinario: Lactobacilus (Crispatus, Jensenii, Rhamnosus, Fermentum), S. Boulardii.
- Candidiasis: S.Boulardii.
Cuando estudiamos el mundo de los probióticos es inevitable escuchar o leer los términos Prebiótico, simbiótico, disbiosis, etc.. así que nos ha parecido muy interesante definir y aclarar estos conceptos.
PREBIÓTICO: es la sustancia que la microbiota emplea de forma selectiva y que confiere un beneficio para la salud del huesped. Deben resistir el ácido del estómago, no ser digeridos (por los enzimas) y no ser absorbidos (en el intestino). Pero SI deben poder ser fermentados o degradados por la microbiota y favorecer el crecimiento y la actividad de determinadas bacterias y/o probióticos. Generalmente son Carbohidratos (oligosacáridos, fructanos, fructooligosacáridos, pectinas, betaglucanos), fibra NO fermentable, compuestos fenólicos y Ácidos Grasos Omega 3.
SINBIÓTICO: es cuando en un mismo preparado incluimos cepas Probióticas con alguna sustancia Prebiótica para favorecer el crecimiento de microorganismos beneficiosos.
SIMBIÓTICO: es cuando en un mismo preparado encontramos 2 ó más organismos.
DISBIOSIS. Corresponde a los desequilibrios en la microbiota , por ello es tan importante tener una alimentación y hábitos saludables que cuiden y mantegan el equilibrio correcto de la microbiota.
SIBO: es el sobrecrecimiento bacteriano en el intestino delgado (Small intestinal bacterial overgrowth). Si lo que predominan son bacterias productoras de metano hablamos de IMO (intestinal methanogen overgrowth) , y si son hongos hablamos de SIFO (small intestinal fungal overgrowth).
Los probioticos que más se emplean en caso de disbiosis son S. Boulardii, E. Faecium, L. Acidophilus, L.Plantarum.
Nuestra recomendación:
